En pleno patio de la presidencia municipal, justo fuera del salón de cabildos, Rodrigo Marcocchio Romero, uno de los dueños de la constructora Azacán, agredió verbalmente al regidor del PVEM, Israel Cabrera Barrón, a quien le reclamó por votar contra la aprobación del dictamen para permitir el cambio de uso de suelo en Los Picachos.
Los hechos ocurrieron el miércoles pasado, cuando el regidor salía del salón de cabildos, refirió Cabrera Barrón.
Señaló que el miércoles, al salir del salón del ayuntamiento, se percató de que Rodrigo Marcochio estaba sentado en el patio de la presidencia municipal, por lo que Cabrera Barrón lo saludó, sin embargo, lejos de regresarle la cortesía, lo agredió y le dijo "que pocos huevos" y varias frases más que el edil no alcanzó a entender, sin embargo, dijo, ante el asombro, le preguntó el motivo de su enojó, a lo que el empresario, volvió a responder con insultos.Ante los insultos de Marcocchio Romero, Israel Cabrera decidió marcharse de la presidencia sin que nadie interviniera para calmar al empresario, pese a que hubo varios testigos del hecho.
La agresión ocurrió 9 días después de la postura que Cabrera Barrón tomó a partir del 13 de julio, cuando el ayuntamiento en pleno aprobó el cambio de uso de suelo en una extensión de 38.8 hectáreas ubicadas en las laderas de los cerros de La Bufa y el cerro del Hormiguero.
Y es que en dicha sesión, los únicos votos en contra fueron los del regidor del Partido Verde y su compañera Carmelita Ortega, lo que motivó el coraje de Rodrigo Marcocchio Romero.
El edil refirió que para prevenir futuras agresiones, ya ha solicitado asesoría jurídica con el diputado de su partido, Carlos Chacón.
Sin embargo, la presión ha sido tal que de plano, Israel Cabrera ya puso sobre la mesa la posibilidad de dejar, en octubre próximo la Comisión de Desarrollo Urbano, que preside.
"Voy a hablar con el alcalde y le voy a solicitar que en octubre, cuando haya cambio de integración de las comisiones, que me quite de la presidencia de la Comisión de Desarrollo Urbano, pues las cosas se están tomando de manera personal en el asunto del cambio de suelo del predio de Azacan", señaló.
Sin embargo, el viernes, al ser cuestionado, respecto al tema, el alcalde, Nicéforo Guerrero, se limitó a señalar que Cabrera Barrón debe seguir como presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano, y que no sabía de la agresión de Rodrigo Marcocchio.
"Conmigo no se ha acercado ni se ha quejado", dijo.
En tanto, Cabrera Barrón, ha tomado en sus manos la defensa de los derechos de los guanajuatenses que se oponen a la urbanización de los predios sobre los que se pretende construir un fraccionamiento con 893 viviendas, un hotel y centros comerciales.
Al parecer, "la gente de Azacan está nerviosa por la presión que está haciendo la gente para que se revierta el dictamen aprobado por el ayuntamiento para que se permita la urbanización en las faldas del cerro de la Bufa", ha comentado e insistió en que seguirá en la defensa y preservación del medio ambiente, "pero si ni en el edificio de la presidencia municipal se me respeta y soy regidor, creo que no tiene caso que siga como presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano, pues además no me invitan a las reuniones que tienen que ver con temas ecológicos en las que participan funcionarios estatales", refirió.
A pesar de la lluvia, las voces de cerca de 500 personas se dejaron escuchar y al grito de "Guanajuato tiene voz" y "Nicéforo, entiende, La Bufa no se vende", expresaron su negativa al cambio de uso de suelo en un predio ubicado en las laderas de Los Picachos a fin de abrir la posibilidad a la urbanización.
La marcha, convocada por cientos de usuarios de la red social "Facebook", fue un éxito, pues pese a la lluvia entre 400 y 500 personas partieron ayer de la estatua de Sóstenes Rocha, frente al palacio de gobierno, pasaron por la Escuela Normal Oficial de Guanajuato y continuaron su paso por Paseo de la Presa y al llegar al jardín de Embajadoras, cerca de 50 personas se les unieron.
Entre el grupo de personas que encabezaba la manifestación estuvo Luis Miguel Rionda y Juan José Prado. También hubo gente de reconocida filiación partidista pero igual gente que no tiene ninguna filiación, como el poeta Juan José Ramírez Palomares, quien llamó la atención sobre ese hecho y pidió que no se deje "que se cuelguen los políticos de un acto ciudadano".Delante de Ramírez Palomares caminaba la diputada del PAN, Ruth Esperanza Lugo Martínez; además hubo un buen número de participantes panistas, entre ellos Guillermo Smith Guerrero.
Participó también el doctor Jorge Cervantes Jáuregui, Carlos Arias Castillo, de la asociación amigos de "El Orito", la maestra Martha Luna Vázquez y el historiador José Luis Lara Valdés, Juan Domingo Villafaña y Eva Carolina Morán Velázquez.
Juan José Prado impidió lo que por momentos parecía podría ser un fracaso, pues cuando menos 50 personas se reunieron en la glorieta de Pozuelos a quienes invitó a unirse a la marcha que saldría del palacio de gobierno, pues caminar de Pozuelos a Los Picachos no tenía ningún sentido.
El maestro Aureliano Ortega Esquivel caminó casi al final de la marcha, igual que Lilia Solórzano, "El peque" Gutiérrez, Juan Carlos Zárate Delgado, Iván Rivelino, Samantha Smith, Arturo Iracheta, el regidor del PVEM, Israel Cabrera Barrón, entre muchos otros; al presidente del Comité Municipal del PRD, José Belmonte se le vio sacando fotos a los manifestantes.
Cuando los manifestantes llegaban al Teatro Juárez, la lluvia se abatió sobre la ciudad y la manifestación llegó hasta la Plaza de la Paz a las 11:30 horas.
Personal de la Dirección de Protección y Vigilancia Municipal clausuró los trabajos de cercado que se realizan en un predio particular, al parecer de Azacan, ubicados en la zona, debido a que no contaba con la licencia correspondiente.
En la cerca que divide el predio del territorio en general, ubicado frente a la Subestación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), muestra unos sellos que a la letra dicen: "Clausurado por una orden de inspección DPV-DI/0305/2010".
También se puede leer que fueron colocados por Héctor Raúl Martínez Manrique, inspector de la Dirección de Protección y Vigilancia, a las 13:00 horas del 22 de julio.
El terreno forma parte del cerro del Hormiguero y se presume que es parte de la propiedad de la constructora Azacan, mismo que sería donado en días próximos al municipio para que se construya un parque urbano.
En el terreno hay varias toneladas del azolve extraído de la Presa de la Olla y colocado en ese lugar, material que se supone sería aplanado para luego reforestar, como ya se ha hecho en partes de la zona, colocando nopales y pirúl.