Más o menos así les propuse a los compañeros de la sala de conversaciones de Radioamlo que "gritáramos" en la sala. Y es que no era para menos; la gran mayoría de los que estábamos en ese momento no vivimos en Iztapalapa, pero la dolosa decisión tomada por el tribunal electoral –parafraseando a Miguel Ángel Velázquez, a ese tribunal sólo lo mueve, dicen algunos, un poder, el cual todos sabemos obedece a los intereses fácticos de los que se creen dueños del país http://www.jornada.unam.mx/2009/06/16/index.php?section=capital&article=036o1cap -, nos causó indignación a todos, pues constituye un claro atropello a los procesos democráticos y se percibe como otro más de los serios indicios que ha dado el pelelato de pretender constituirse en un régimen fascista.
El camino de los iztapalapenses para deshacerse de la mafia que controla su delegación ha sido arduo. En los últimos tiempos, hicieron todo por sacar los chuchos del PRD de la demarcación, con miras a poder lograr en 2009 una candidatura en primer lugar, de alguien que trabaje por el bien de la delegación y no por el enriquecimiento de un grupúsculo; y en segunda instancia, que fuera acorde con el movimiento progresista de Andrés Manuel López Obrador.
Partiré de un solo enunciado: Calderón odia. Durante su campaña en 2006, tuve oportunidad de escucharlo en una obsequiosa entrevista que le hizo Antonio Zambrano, alias "El Panda", popular conductor de un burlesco programa de radio. Al referirse a sus estudios en la Libre de Derecho, el usurpador abundó en que la UNAM lo había rechazado "por ser de provincia".
En el pueblo de donde vengo, ese es un mito capitalinofóbico muy difundido entre los que no ingresan a la Universidad Nacional; aunado a esto, el particular tono amargo con el que prácticamente empezó a desahogar su frustración, me hizo sentir miedo "Si este enano queda, arremeterá contra la educación pública", pensé. No tenía la más mínima idea de todo lo que vendría después.
Traigo a cuento esto porque es claro que decidió vengarse de los mexicanos que no sólo no lo eligieron, sino que millones de ellos decidieron repudiarlo. La mayoría de los que activamente lo desconocemos, somos capitalinos o avecindados en el DF; de ahí su odio a la Gran Tenochtitlan.
No se ha conformado con la continua descalificación mediática, sino que incluso ha incurrido en prácticas con claros rasgos genocidas, como la de pretender matarnos de sed, a través de su sirviente Luege Tamargo, chachalaca a la que ha traído argumentando que no pagamos el agua.
Por cierto, dentro del marco de esas marrullerías golpistas contra el obradorismo local -el cual sigue teniendo como referente simbólico al GDF-, se erigieron en defensores de una delegación que padece la carencia de agua por culpa de los malos servicios públicos… administrados, por cierto, por la mafia a la que ahora apapachan a través del apoyo a una candidata que el PRD no eligió para ser su abanderada.
El golpe intenta ser una carambola: dejarle claro a todos los mexicanos que ellos, la oligarquía, son los únicos que deciden quién gobierna y en qué términos. Esto más la campaña de voto en blanco, busca implementarnos la idea de que somos vasallos, no ciudadanos. Por otra parte, golpear al obradorismo capitalino en una delegación que a todas luces es la que mayor músculo aporta a nuestro movimiento. Y por último, dado el contubernio con los chuchos, abrirle paso a los "triunfos" de panuchos en otras delegaciones, con lo cual buscan mermar el corazón de la Resistencia Civil Pacífica, que es el DF.
Brevemente subrayaré que uno de los beneficiados sería Obdulio Ávila, candidato a delegado en Coyoacán y exdiputado federal que estuvo a cargo de cabildear los apoyos para la privatización de Pemex. Su candidatura ha resultado muy dispendiosa y se nota claramente que buscan premiarlo por sus servicios como operador de la apátrida reformita y por su constante activismo a favor del PAN y del gobierno espurio en Coyoacán.
El Presidente contestó con otra jugada que en primera lectura me ha parecido laberíntica y muy arriesgada. Se pedirá el voto para el candidato del PT, Rafael Acosta, quien dimitirá en cuanto tome posesión, para que el Jefe de Gobierno proponga a la Asamblea Legislativa a Clara Brugada; como se espera que la mayoría de los diputados locales sean obradoristas, ella será la delegada finalmente.
No dejo de pensar que no tendría nada de malo dejar gobernar a un candidato de la RCP el cual ganará bajo las siglas del PT. Después de todo, se nos ha pedido que votemos por los candidatos obradoristas, residamos en donde residamos, y si el PRD finalmente tendrá una candidata chucha, pues es lógico que ganase el abanderado del partido de la estrellita.
Hasta aquí bien, pero reconozco haber eludido un detalle: la candidata del PRD no sólo es impuesta por el TEPJF, sino que además, usufructuará el nombre de Clara Brugada, la candidata obradorista que los iztapalapenses lucharon mucho por hacerla llegar a los volantes, cartelones y boletas electorales.
La jugada del Presidente también es una carambola: pasará el Movimiento por la prueba de fuego de la unidad, y no sólo entre las cúpulas partidocráticas (de sobra se nota el planteamiento a Marcelo Ebrard, que últimamente ya se la creyó que tendrá su duelo de metrosexuales: "¿Y tú que? ¿Jalas o te pandeas, carnal?"), sino entre nosotros, pues somos los encargados de blindar al Movimiento con nuestra Vigilancia Ciudadana, abriremos la ruta alterna al desaliento y para rematar, así como ellos pretenden hacernos llegar el mensaje de que buscan quitarnos nuestros derechos ciudadanos, nosotros enviaremos el mensaje de que no son ellos quienes nos van a decir quiénes deben de gobernarnos.
Apuesto por el errático comportamiento clasista del PAN, partido que desconoce completamente la realidad del país al que desprecian y sueñan ver convertido en vasallo de algún Reino Caucásico. Han creído que todo se puede lograr en complicidad con ladrones y sicarios, tal como lo han hecho a nivel federal con el PRI y el cártel de Elba Esther Gordillo, pero ni siquiera les pasa por la cabeza que Iztapalapa es, desde hace más de 500 años, una comunidad con fuertes redes comunitarias y de identidad cultural. No aceptarán imposiciones de extraños y menos si se oponen a las decisiones ya tomadas por la comunidad.
Hoy, Iztapalapa es todo México. Así permanezcan sumidos en la negligencia cívica e ignoren la dimensión de lo que se juega en esa delegación, los mexicanos hoy día son todos iztapalapenses, y en nosotros, la Resistencia, recae inclinar la balanza a favor del progresismo libertario.
El ciclo mítico prehispánico se reiniciaba en la cima del Iztapaltépetl, cada 52 años, con la Ceremonia del Fuego Nuevo. Ahora, el sincretismo cultural emplaza la renovación del ciclo mítico cristiano con la muerte y resurrección del Ixiptla ("personificador del dios") de Jesús de Nazareth cada año en este mismo lugar.
La pregunta es: el ciclo mítico-político de los Estados Unidos Mexicanos (1810-1910-2010) ¿Habrá de renovarse en la ancestral Iztapalapan?
El camino de los iztapalapenses para deshacerse de la mafia que controla su delegación ha sido arduo. En los últimos tiempos, hicieron todo por sacar los chuchos del PRD de la demarcación, con miras a poder lograr en 2009 una candidatura en primer lugar, de alguien que trabaje por el bien de la delegación y no por el enriquecimiento de un grupúsculo; y en segunda instancia, que fuera acorde con el movimiento progresista de Andrés Manuel López Obrador.
Partiré de un solo enunciado: Calderón odia. Durante su campaña en 2006, tuve oportunidad de escucharlo en una obsequiosa entrevista que le hizo Antonio Zambrano, alias "El Panda", popular conductor de un burlesco programa de radio. Al referirse a sus estudios en la Libre de Derecho, el usurpador abundó en que la UNAM lo había rechazado "por ser de provincia".
En el pueblo de donde vengo, ese es un mito capitalinofóbico muy difundido entre los que no ingresan a la Universidad Nacional; aunado a esto, el particular tono amargo con el que prácticamente empezó a desahogar su frustración, me hizo sentir miedo "Si este enano queda, arremeterá contra la educación pública", pensé. No tenía la más mínima idea de todo lo que vendría después.
Traigo a cuento esto porque es claro que decidió vengarse de los mexicanos que no sólo no lo eligieron, sino que millones de ellos decidieron repudiarlo. La mayoría de los que activamente lo desconocemos, somos capitalinos o avecindados en el DF; de ahí su odio a la Gran Tenochtitlan.
No se ha conformado con la continua descalificación mediática, sino que incluso ha incurrido en prácticas con claros rasgos genocidas, como la de pretender matarnos de sed, a través de su sirviente Luege Tamargo, chachalaca a la que ha traído argumentando que no pagamos el agua.
Por cierto, dentro del marco de esas marrullerías golpistas contra el obradorismo local -el cual sigue teniendo como referente simbólico al GDF-, se erigieron en defensores de una delegación que padece la carencia de agua por culpa de los malos servicios públicos… administrados, por cierto, por la mafia a la que ahora apapachan a través del apoyo a una candidata que el PRD no eligió para ser su abanderada.
El golpe intenta ser una carambola: dejarle claro a todos los mexicanos que ellos, la oligarquía, son los únicos que deciden quién gobierna y en qué términos. Esto más la campaña de voto en blanco, busca implementarnos la idea de que somos vasallos, no ciudadanos. Por otra parte, golpear al obradorismo capitalino en una delegación que a todas luces es la que mayor músculo aporta a nuestro movimiento. Y por último, dado el contubernio con los chuchos, abrirle paso a los "triunfos" de panuchos en otras delegaciones, con lo cual buscan mermar el corazón de la Resistencia Civil Pacífica, que es el DF.
Brevemente subrayaré que uno de los beneficiados sería Obdulio Ávila, candidato a delegado en Coyoacán y exdiputado federal que estuvo a cargo de cabildear los apoyos para la privatización de Pemex. Su candidatura ha resultado muy dispendiosa y se nota claramente que buscan premiarlo por sus servicios como operador de la apátrida reformita y por su constante activismo a favor del PAN y del gobierno espurio en Coyoacán.
El Presidente contestó con otra jugada que en primera lectura me ha parecido laberíntica y muy arriesgada. Se pedirá el voto para el candidato del PT, Rafael Acosta, quien dimitirá en cuanto tome posesión, para que el Jefe de Gobierno proponga a la Asamblea Legislativa a Clara Brugada; como se espera que la mayoría de los diputados locales sean obradoristas, ella será la delegada finalmente.
No dejo de pensar que no tendría nada de malo dejar gobernar a un candidato de la RCP el cual ganará bajo las siglas del PT. Después de todo, se nos ha pedido que votemos por los candidatos obradoristas, residamos en donde residamos, y si el PRD finalmente tendrá una candidata chucha, pues es lógico que ganase el abanderado del partido de la estrellita.
Hasta aquí bien, pero reconozco haber eludido un detalle: la candidata del PRD no sólo es impuesta por el TEPJF, sino que además, usufructuará el nombre de Clara Brugada, la candidata obradorista que los iztapalapenses lucharon mucho por hacerla llegar a los volantes, cartelones y boletas electorales.
La jugada del Presidente también es una carambola: pasará el Movimiento por la prueba de fuego de la unidad, y no sólo entre las cúpulas partidocráticas (de sobra se nota el planteamiento a Marcelo Ebrard, que últimamente ya se la creyó que tendrá su duelo de metrosexuales: "¿Y tú que? ¿Jalas o te pandeas, carnal?"), sino entre nosotros, pues somos los encargados de blindar al Movimiento con nuestra Vigilancia Ciudadana, abriremos la ruta alterna al desaliento y para rematar, así como ellos pretenden hacernos llegar el mensaje de que buscan quitarnos nuestros derechos ciudadanos, nosotros enviaremos el mensaje de que no son ellos quienes nos van a decir quiénes deben de gobernarnos.
Apuesto por el errático comportamiento clasista del PAN, partido que desconoce completamente la realidad del país al que desprecian y sueñan ver convertido en vasallo de algún Reino Caucásico. Han creído que todo se puede lograr en complicidad con ladrones y sicarios, tal como lo han hecho a nivel federal con el PRI y el cártel de Elba Esther Gordillo, pero ni siquiera les pasa por la cabeza que Iztapalapa es, desde hace más de 500 años, una comunidad con fuertes redes comunitarias y de identidad cultural. No aceptarán imposiciones de extraños y menos si se oponen a las decisiones ya tomadas por la comunidad.
Hoy, Iztapalapa es todo México. Así permanezcan sumidos en la negligencia cívica e ignoren la dimensión de lo que se juega en esa delegación, los mexicanos hoy día son todos iztapalapenses, y en nosotros, la Resistencia, recae inclinar la balanza a favor del progresismo libertario.
El ciclo mítico prehispánico se reiniciaba en la cima del Iztapaltépetl, cada 52 años, con la Ceremonia del Fuego Nuevo. Ahora, el sincretismo cultural emplaza la renovación del ciclo mítico cristiano con la muerte y resurrección del Ixiptla ("personificador del dios") de Jesús de Nazareth cada año en este mismo lugar.
La pregunta es: el ciclo mítico-político de los Estados Unidos Mexicanos (1810-1910-2010) ¿Habrá de renovarse en la ancestral Iztapalapan?