
4/Abril/2009
Busca restaurar Alhóndiga
El funcionario federal declaró que buscará subsanar las carencias que ha detectado en el inmueble, como cantería que se está desprendiendo y una revisión integral de la instalación eléctrica, hidráulica y sanitaria.
“El inmueble requiere de mantenimiento continuo en aspecto estructural, algunos ornamentos de cantería se están desprendiendo.
“Es necesario hacer un estudio para verificar las condiciones reales sobre que tan estables está la cantería”, dijo.
Arellano Hernández aclaró que también necesita saber el costo de las reparaciones y el recurso económico con el que podría contar.
“El inmueble está funcionando bien, pero hay que cuidar esos aspectos para ver qué problemas presentan y qué riesgos puede haber”, declaró.
Arellano Hernández tomó posesión en el cargo el miércoles, luego de que este fuera validado por Guillermina Gutiérrez Lara, directora del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Guanajuato.
Anteriormente se dedicaba a hacer proyectos de restauración y de obra nueva; trabajaba en la Dirección de Protección y Vigilancia, dependiente de la Dirección General de Desarrollo Urbano.
Arellano Hernández es nacido en el Distrito Federal pero su familia es de Dolores Hidalgo; estudió arquitectura en la Universidad de Guanajuato de 1967 a 1971.
Actualmente catedrático en el Departamento de Arquitectura de la UG; también ha trabajado en los gobiernos de Rafael Corrales Ayala, Carlos Medina Plascencia, Arnulfo Vázquez Nieto y Eduardo Romero Hicks.
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¿Reponer la cantería? Parafraseando a Mario di Constanzo, uno señala la luna y los panuchos ven el dedo. ¡Qué cantería ni qué las hilachas!, el edificio no necesita los dispendios que siempre proponen los arquitectos...por eso está como está el INAH Guanajuato, uno de los más atrasados del país, porque siempre tienen en los puestos directivos a arquitectos con mentalidad de burocratuchos. Creen que la misión del Instituto es mantener bonitas fachaditas que vengan los turistas y nos elogien. Olvidan que la misión es "Investigar, Conservar y Difundir"; en ese orden.
Antes de ser el Museo Regional, la Alhóndiga era la cárcel municipal. En 25 años no he visto que cambien NI UNA SOLA de las vitrinas del museo, vamos, ni para limpiar las piezas. Hoy en día, el edificio sigue siendo una cárcel, pero de los valiosos objetos con los cuales podríamos saber algo más de nuestra historia regional y nacional ¿acaso los directivos desconocen que fue en ese Recinto de la Patria donde se forjó la Nación? ¡Sin la victoria de las fuerzas independentistas comandadas por Allende en la Batalla de Granaditas, simplemente no habría prosperado el ideal de libertad! En fin, que siempre se la pasan con sus trabajos de fachaditas. Así es el INAH Guanajuato, un "INHititita".
Lo que requiere la Alhóndiga es un buen programa de conservación, sí, porque debe tener mantenimiento el edificio, que por sí mismo es una pieza de la Historia Nacional. Pero es más urgente, visto que en un cuarto de siglo a nadie le ha importado, renovar la museografía, rediseñarla.
Lo que le falta al museo, es convertirse en un centro de investigación, para que de ahí parta la conformación de un guión museográfico. Lo que priva ahí es un guión obsoleto -no se usa ese tipo de museografía desde los 60-, basado en el coleccionismo, nomás exponen cacharros bonitos pero no dan información educativa...y de pilón todos polvosos.
¿Así cómo van a llevarse algo de provecho nuestros distinguidos visitantes? ¿Así cómo van a apreciar en su justo valor el honor de ser guanajuateño las nuevas generaciones?

Pero no, lo más importante es gastarse una lanotototota en "arreglar la cantera"... a ver si no nos salen después conque le quieren poner foquitos, como a las Pirámides de Teotihuacan.